Cobardía

En algunos días me temo como mi peor enemiga. Si mi sombra tuviese sombra, sería yo en una noche como ésta. Me temo en algunas de las precisiones que puedo esbozar, en esas esperanzas de último recurso a las que cuelgo fatalismos como aretes. Busco finales (un final) para un comienzo al que le estoy corriendo la arruga. Lo que más temo de mí es precisamente no contar con la voluntad de hacer derramar el vaso de las razones para temerme

Escribo para hacerme aterradora en el silencio de los bytes

Comentarios

Entradas populares de este blog

Ofrenda

Reflejo

Sunset